Habrá derramamiento de sangre, advierte Uribe.

● El ayuntamiento de Coyuca al servicio de la empresa de Ruffo Ávila, acusa la COS

REDACCIÓN.
El secretario general de la Confederación de Organizaciones Sindicales, José Guadalupe Uribe Guevara advirtió de un posible derramamiento de sangre si hay confrontación, con los cetemistas guerrerenses, pues asegura que “no se puede interferir en una contratación colectiva porque es motivo de confrontación y que puede haber lesionados o puede llegar a los muertos que ya ha pasado en muchos movimientos en situaciones de obras en construcción y aquí se ha visto en Guerrero, en varias regiones.
Anticipó el riesgo de que en Coyuca de Benítez sí alguien se opone a alguna situación legal pueda ocasionar que haya derramamiento de sangre lo cual no es correcto “que los lideres no tengan la capacidad negociadora, concertadora, de dialogo y que echen a la gente a la confrontación y lesionando a la pobre gente que a veces no sabe ni a lo va”.
El también presidente de la Comisión de Relaciones Internacionales del Congreso del Trabajo en México, Uribe Guevara, consideró que los cacicazgos deben acabarse porque son la antesala de la delincuencia. “Esos cacicazgos se tienen que acabar ya no es posible que siga habiendo en algunos grupos esos cacicazgos que han convertido a grupos sindicalistas en grupos de delincuentes, delincuentes que inclusive se han amafiado con las famosas mañas, que son los mismos sindicalistas, entonces esto tiene que cambiar”, sentenció.
Pidió respeto a su organización en Coyuca de Benítez donde asegura que “tienen que aprender los que se dicen dirigentes sindicales en que se debe de respetar la contratación colectiva si mi organización firma un contrato con una empresa se debe respetar”.
También se pronunció porque “se descubra a los malvivientes, a los delincuentes del sindicalismo, a las autoridades coludidas que se involucren y que se exhiban ante la sociedad y que se les castigue conforme a la ley de acuerdo a los delitos que provoquen”.
Los Ávila, se sienten dueños de Coyuca: Cabrera
En tanto, José Alfredo Cabrera Barrientos, quien es actualmente el delegado de la COS, narra que el hostigamiento del que han sido objeto por parte del sindicato que liderea Ruffo Ávila Morales a raíz de que la empresa constructora Duos Comercializadora e Infraestructura de Sociedad Anónima de Capital Variable, con sede en el estado de México, contratada por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) para realizar la ampliación de la Carretera Acapulco – Zihuatanejo otorgó el contrato colectivo a su organización que le otorga el derecho a prestar el servicio de acarreo de los materiales de construcción que se ocupan para la modernización de esa vía de la Costa Grande.
Este consorcio mexiquense a su vez contrató a la Confederación de Organizaciones Sindicales (COS), un organismo sindical por presencia nacional pero con influencia principalmente en el Centro del país, para llevar a cabo los trabajos en 10 kilómetros de vía, del tramo comprendido del poblado El Cayaco al municipio de Atoyac de Álvarez. La incursión de un nuevo actor no gustó en nada a los hermanos y el empresario constructor Ruffo Ávila Morales, comenzó a hostigar a la COS, que ya tiene el contrato firmado, del cual Costa Brava posee una copia.
“…el Sindicato que encabeza el señor Ruffo Ávila, hemos tenido la presencia ya de intimidaciones pero sobre todo el encubrimiento total sobre el tratar de contener o tener el poder ellos mismos. Somos testigos y ya víctimas de gente como ellos que han tratado de quitarnos nuestros contratos, contratos que ya le empresa tiene firmados con nosotros porque depositaron su confianza y porque le hemos demostrado con trabajo lo que podemos hacer”, sostiene Cabrera.
Afirma que “el señor Ruffo Ávila, a su servidor, él me ha hablado por teléfono diciéndome que el contrato lo debe de tener él porque él es el único que debe puede el poder en Coyuca y que por lo tanto me favorece y que si no me atenga a las consecuencias”.
Y añadió: “Ese ánimo de impunidad es por la seguridad que le da su hermano el presidente municipal que ambos son Ávila Morales, que uno es como relaciones públicas, y el otro como operador tratan de sentirse dueños del poder en Coyuca de Benítez”.
El retraso de la terminación del puente del río Coyuca por el asfaltado de mala calidad que realizó Ruffo, asegura José Alfredo, es una prueba fehaciente del influyentismo que el alcalde Ramiro Ávila está ejerciendo en el municipio a favor de su hermano.
“Esa es una prueba del encubrimiento que se dio por parte de su hermano el señor presidente para que él como Sindicato entrara a trabajar ahí y aquí están los resultados, que no tienen la experiencia, no tienen la capacidad ni el equipo necesario para poder hacer eso, entonces una empresa de mucho prestigio como la que vino a hacer el puente se dejó embaucar no tanto por el líder sindical sino por su hermano el presidente en exigir que éste participara y estuviera adentro de esta construcción, los resultados son el levantamiento asfáltico de 800 metros cúbicos que es un golpe para la empresa y lo que ha atrasado la inauguración de una obra magnífica por nuestro señor presidente de la República, entonces esto son los resultados de que no tienen la capacidad ni siquiera tienen el equipo y se están metiendo aprovechándose del poder que su hermano, el presidente municipal tiene en este momento”, describió.