• Celebra misa arzobispo de Acapulco de confirmaciones en honor a San Miguel
OSSIEL PACHECO
El arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlo llamó a los sacerdotes, religiosas y laicos a ser verdaderos discípulos de Cristo y convertirse en constructores de paz en medio de ese ambiente de tanta violencia que se vive, “de mucho miedo y desconfianza que hay” porque los católicos deben tener un corazón en Cristo que conlleva tener una conducta amable, de paciencia para sobrellevar los errores y respetar lo que otros piensan.
La Iglesia tiene el compromiso de construir la paz, de atender a las víctimas de la violencia que se vive y ahora atenderá a los victimarios que son personas necesitan del perdón porque son pecadores y deben dejar de hacer el mal, “es parte del compromiso de construir la paz”, expresó el prelado católico la tarde del lunes 28 de septiembre pasado al celebrar la misa de confirmaciones por la fiesta patronal de San Miguel Arcángel ante cientos de católicos que acudieron a recibir ese sacramento, pese a las fuertes lluvias que caían por el paso del huracán Marty.
Acompañaron al jerarca católico, los párrocos Nicolás Orbe de la O, anfitrión; Francisco Franco Sánchez Ocampo, de Espinalillo; Benjamín Carrillo Metodio, de Tecoanapa; y Juvenal Aponte González, de El Coloso. Garfias Merlo llegó con retraso al Club Campestre Mi Rancho, donde ofició la eucaristía, y en breve conversación, confirmó que invitó al Papa Francisco, con quien se reunió en Cuba durante su visita pastoral, a visitar Guerrero en su próxima visita a México programada para los primeros meses de 2016.
La fiesta patronal se reviste de colorido, fervor, alegría y pirotecnia para homenajear al santo patrono San Miguel Arcángel, quien es honrado por los católicos de todas las colonias y barrios de la cabecera municipal, de donde parten peregrinaciones y procesiones que llegan por las tardes y noches al templo parroquial, donde en un ambiente feriado que acompaña e invade al zócalo de la ciudad son quemados los tradicionales toritos que terminan la noche del 29 de septiembre con la quema del castillo y los juegos pirotécnicos que en esta ocasión se vieron aplazados hasta la noche del 6 de octubre por las fuertes lluvias del huracán Marty. Es muy común cada año, el desfile de los charros en honor a San Miguel por la avenida principal como lo peregrinación de los transportistas en sus unidades que llegan al templo.